Díficil pregunta pero muy buena.

Lo que antiguamente era un instrumento para saber la hora se ha convertido en un simple artículo poco útil y menos eficiente que otras opciones.

Aun así, a nivel cultural la idea del reloj como complemento y símbolo de vestimenta sigue en la mente del consumidor. Es por ello, que sobrevive.

Además existe un mercado secundario muy potente porque no dejan de ser piezas coleccionables, además se pueden llevar allá a donde uno quiera ir y para los caballeros pueden ser un símbolo de un día importante en nuestras vidas que después se pueden legar a nuestros descendientes.

Es por ello, que marcas como Rolex o Patek Philippe tienen un gran valor de reventa porque la gente todavía los ven como objetos con historia y belleza que puedes sostener entre tus manos.