Imagina que alguien llegue a los más profundo de ti, que desate todas tus fieras, que tumbe todos tus muros, que olvides la vergüenza y te dejes guiar por el vaivén de su lengua, que lo sientas en tú clítoris y en el alma, que vuestras ganas vibren al ritmo en el que vuestra piel se estremece, que lo orgasmos lleguen a sus oídos y a su espalda, que sienta en su boca el deseo el placer que nace de ti, que sientas la suavidad con la que sus manos viajan por tu piel y las ganas con la que sus dedos agarran tus pechos, ese momento de compartir miradas, suspiros, gemidos, momento en el que ese "te amo" dicho al unísono, da paso a que sientas todo su deseo penetrando hasta lo más profundo de ti, que su lengua baile sobre el círculo de tus pezones y el eco de tu voz revuelva su pelo, porque así es el amor, dos personas, que bajan sus barreras mostrando la parte más bonita y la parte más pervertida, siendo ángeles y demonios que jamás dejan de amarse...