NO TE DEJES ENGAÑAR POR LA PRIMERA IMPRESIÓN.
Muchas veces nos apresuramos y juzgamos a las personas por la primera impresión que tenemos de ellas. Si hacemos eso corremos el riesgo de equivocarnos, y quizás cometamos un error del cual podríamos arrepentirnos.
No juzguemos por las apariencias, no nos apresuremos para condenar, seamos cautos y benignos para con los demás.
"NO JUZGUÉIS, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán a medir." (Mateo 7:1-2)
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"NO JUZGUÉIS, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán a medir." (Mateo 7:1-2)
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No juzguemos por las apariencias, no nos apresuremos para condenar, seamos cautos y benignos para con los demás.
"NO JUZGUÉIS, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán a medir." (Mateo 7:1-2)
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