Mira. Hace unas semanas envié una propuesta a un tatuador. El presupuesto era de 900€ + IVA. Bien.
Al tercer día me llamó por teléfono para decirme que el precio le parecía caro.
Normal, después de ver por ahí gente que hace
#web por 60€ al año, todo lo demás te parece caro.
Páginas que no tienen trabajado nada de contenido y que te venden como “personalizada”, pero que es una plantilla que usan para todo el sector.
Pero no voy a entrar en eso, porque es perder el tiempo.
Después de un rato al teléfono escuchando cosas como “es que un
#autonomo o
#pyme no puede pagar eso por una web”
“Con esos precios no creo que vendas muchas” o “No creo que eso te lleve tanto tiempo”, se quedó callado.
Quizás pensó que le iba a decir que tenía razón, que se la hacía gratis porque me gusta ayudar y mi misión es que todo el mundo tenga una web.
O que se lo hacía a cambio de un par de
#testimonios que me atraerán un millón de personas por sus palabras bonitas.
Al final, leen cosas por internet y luego opinan que todos somos igual de malos.
Se equivocó.
Porque como hace tiempo que quiero hacerme un tatuaje, di por perdida la venta (mejor para mi salud) y le pregunte cuando me cobraría por uno.
Que sí, es imbécil en cuanto a negocios, pero el tío tatúa de cojones, al menos para mí, y por eso le pregunté.
Me dio el precio. 400 euros.
Y aquí el karma, me picó en la puerta y me dijo, dale.
Así que le dije.
“Me parece muy caro, porque yo quiero algo pequeño y pensé que no sería tan caro”
Y me dijo ya, pero es que cada hora de mi trabajo son 80€ y cálculo que son 4 horas más luego el gasto de tinta.
¿Qué quiero que veas con esta historia de mierda?
Que valora su tiempo, pero no el mío.
Valora su trabajo, pero no el de otros.
Le pone precio a sus horas, pero no acepta las que ponen otros.
Quiere cobrar bien su trabajo, pero no que le cobren por uno.
Dice que es caro lo mío, pero lo suyo es un
#precio “justo”.
Quiere poner el precio a algo que desconoce, para lo que ha pedido ayuda y de lo que no tiene ni idea. No sabe nada de
#web, ni de
#copywriting, pero sabe lo que vale todo ese trabajo.
Y esto pasa mucho. Más de lo que debería.
Empresas y negocios que valoran mucho lo suyo, pero todo lo demás les parece caro.
Mira.
Yo no tengo ni idea de tatuajes y no puedo saber si eso es caro o barato porque no soy capaz de hacer un dibujo recto con el Paint.
Cuando quiera hacerme uno, buscaré alguien que me guste como trabaja y pagaré lo que me diga, por qué me soluciona algo que yo no sé hacer.
Invierte su tiempo en mí, para que yo tenga un beneficio, y eso, amigos míos, vale dinero.
El mío, el tuyo y el de cualquiera.
El tiempo se paga. A ver si lo entendemos de una vez.
Y si quieres una web decente, con textos decentes y que no diga gilipolleces que espantan los clientes, es aquí
https://cuboclick.com/propuesta/Mira. Hace unas semanas envié una propuesta a un tatuador. El presupuesto era de 900€ + IVA. Bien.
Al tercer día me llamó por teléfono para decirme que el precio le parecía caro.
Normal, después de ver por ahí gente que hace #web por 60€ al año, todo lo demás te parece caro.
Páginas que no tienen trabajado nada de contenido y que te venden como “personalizada”, pero que es una plantilla que usan para todo el sector.
Pero no voy a entrar en eso, porque es perder el tiempo.
Después de un rato al teléfono escuchando cosas como “es que un #autonomo o #pyme no puede pagar eso por una web”
“Con esos precios no creo que vendas muchas” o “No creo que eso te lleve tanto tiempo”, se quedó callado.
Quizás pensó que le iba a decir que tenía razón, que se la hacía gratis porque me gusta ayudar y mi misión es que todo el mundo tenga una web.
O que se lo hacía a cambio de un par de #testimonios que me atraerán un millón de personas por sus palabras bonitas.
Al final, leen cosas por internet y luego opinan que todos somos igual de malos.
Se equivocó.
Porque como hace tiempo que quiero hacerme un tatuaje, di por perdida la venta (mejor para mi salud) y le pregunte cuando me cobraría por uno.
Que sí, es imbécil en cuanto a negocios, pero el tío tatúa de cojones, al menos para mí, y por eso le pregunté.
Me dio el precio. 400 euros.
Y aquí el karma, me picó en la puerta y me dijo, dale.
Así que le dije.
“Me parece muy caro, porque yo quiero algo pequeño y pensé que no sería tan caro”
Y me dijo ya, pero es que cada hora de mi trabajo son 80€ y cálculo que son 4 horas más luego el gasto de tinta.
¿Qué quiero que veas con esta historia de mierda?
Que valora su tiempo, pero no el mío.
Valora su trabajo, pero no el de otros.
Le pone precio a sus horas, pero no acepta las que ponen otros.
Quiere cobrar bien su trabajo, pero no que le cobren por uno.
Dice que es caro lo mío, pero lo suyo es un #precio “justo”.
Quiere poner el precio a algo que desconoce, para lo que ha pedido ayuda y de lo que no tiene ni idea. No sabe nada de #web, ni de #copywriting, pero sabe lo que vale todo ese trabajo.
Y esto pasa mucho. Más de lo que debería.
Empresas y negocios que valoran mucho lo suyo, pero todo lo demás les parece caro.
Mira.
Yo no tengo ni idea de tatuajes y no puedo saber si eso es caro o barato porque no soy capaz de hacer un dibujo recto con el Paint.
Cuando quiera hacerme uno, buscaré alguien que me guste como trabaja y pagaré lo que me diga, por qué me soluciona algo que yo no sé hacer.
Invierte su tiempo en mí, para que yo tenga un beneficio, y eso, amigos míos, vale dinero.
El mío, el tuyo y el de cualquiera.
El tiempo se paga. A ver si lo entendemos de una vez.
Y si quieres una web decente, con textos decentes y que no diga gilipolleces que espantan los clientes, es aquí https://cuboclick.com/propuesta/
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